En ViveZana.com sabemos que bajar de peso es un propósito que requiere mucha constancia y disciplina. Es necesario seguir una dieta que sea adecuada para nuestro tipo de cuerpo y nuestras actividades, realizar una rutina de ejercicio y, sobre todo, no desesperarse.

Buenos resultados

Si luego de mucho esfuerzo has comenzado a ver los resultados deseados, es necesario que continúes con un buen plan de alimentación para que no sufras el tan odiado ‘efecto rebote’, es decir, que de nuevo aumentes de peso.

No al rebote

Muchos veces la personas se confían y creen que, como ya lograron reducir de talla, ya no tienen que seguir una dieta tan estricta y pueden comenzar a darse ‘permisos’ y consumir postres, grasas saturadas y refrescos. El problema es que esos ‘pequeños gustos’ dejan de ser algo ocasional y de nuevo se convierten en un hábito alimenticio, por lo que el incremento de peso aparece otra vez.

Para que esto no te suceda, te decimos cuáles son los alimentos que debes mantener bajo control, para que no sufras el temido ‘rebote’. No es necesario que los elimines por completo de tu alimentación, pero sí debes limitar su consumo.

 Sal
Como tal, la sal no provoca un aumento de peso. Lo que ocurre es que el exceso de este condimento propicia la retención de líquidos, lo que entorpece el metabolismo y nos hace sentirnos -y vernos- hinchados.

Arroz blanco
Este alimento posee una gran cantidad de almidón, elemento que puede provocar que nuestro metabolismo sea más lento y se aumente de peso. En lugar de arroz blanco, prefiere el arroz integral.

Más…

Harinas refinadas
En especial el pan blanco, es lo que debes mantener bajo control. Las harinas refinadas son uno de los alimentos que se convierten más rápido en azúcar al momento de la digestión, lo que a su vez provoca que se acumule la grasa en el cuerpo.

Alimentos que producen gas
Por ejemplo brócoli, coles de Bruselas, col y cebollas. Las enzimas que estos alimentos contienen provocan gases durante la digestión. Dichos gases se acumulan en el tracto gastrointestinal y provocan hinchazón. Se recomienda disminuir el consumo de estos ingredientes hasta que nuestro organismo se adapte a su nuevo peso y a la dieta saludable que debemos seguir.

Leche
La leche entera contiene glucosa y galactosa, dos azúcares que rápidamente pasan a nuestro torrente sanguíneo al momento de la digestión. Para que esos azúcares no se conviertan en grasa y se acumulen, procura tomar leche deslactosada y no abuses en el consumo de yogurt, queso y otros lácteos.