Tips Saludables
Tips Saludables
Publicado por: Periodista Ximena Alarcón
Fecha: 2 mayo, 2017
¿Por qué se produce?
Aunque muchas partes del cuerpo son esenciales para producir glóbulos rojos, la mayor parte del trabajo se hace en la médula ósea, el tejido blando en el centro de los huesos que ayuda a la formación de las células sanguíneas. Los glóbulos rojos sanos duran entre 90 y 120 días. Las células viejas son eliminadas. Una hormona llamada eritropoyetina producida en los riñones le da la señal a la médula ósea para producir más glóbulos rojos. La hemoglobina es la proteína que transporta el oxígeno dentro de los glóbulos rojos y les da su color rojo. Las personas con anemia no tienen suficiente hemoglobina.
Muchas pueden ser las causas de la anemia. Entre ellas están:
– Ciertos medicamentos.
– Algunas enfermedades como cáncer, colitis ulcerativa, insuficiencia renal o artritis reumatoidea,
– Algunas alteraciones genéticas pueden ser responsables de ciertos tipos de anemia hereditaria.
– Pérdida de sangre. Por ejemplo, menstruaciones muy abundantes, úlceras gástricas o hemorragias por heridas.
– Dieta deficiente.
– Embarazo
– Enfermedades de la médula ósea.
– Algunas enfermedades del sistema inmunológico que causan la destrucción de las células sanguíneas.
– Cirugías del estómago o intestinos, que reducen la absorción de fierro, la vitamina B12 o el ácido fólico.
Los síntomas pueden incluir:
– Dolor torácico
– Vértigo o mareo (especialmente al pararse o con esfuerzo)
– Fatiga o falta de energía
– Dolores de cabeza, dificultad para concentrarse.
– Dificultad para respirar (especialmente durante el ejercicio)
¿Cómo se diagnostica?
El examen clínico puede orientar al médico hacia el diagnóstico. Algunos exámenes de laboratorio, le ayudarán a confirmarlo. Entre esos exámenes están:
– Hemograma
– Ferremia y ferritina
– Niveles sanguíneos de vitamina B12, ácido fólico y otras vitaminas y minerales.
¿Cómo se trata?
El tratamiento dependerá del tipo de anemia diagnosticado. Puede incluir suplementos de fierro, vitaminas y minerales u otros medicamentos específicos.
Fuente: Biblioteca Nacional de Medicina, EE.UU.